Blockbusters '07: "Shrek Tercero"
No es buena señal que el máximo valedor de una cinta de animación no sea su equipo de dirección, ni siquiera su elenco de voces, sino su "ejecutivo al cargo de la producción" (es literal: mirad IMDb), Jeffrey Katzenberg. Resulta difícil no pensar que un tipo así concibe su franquicia en términos de mercado: su objetivo no parece ser crear una saga de animación destinada a perdurar, sino maximizar el beneficio obtenido con la primera entrega. Por tanto, "Shrek Tercero" no es más que otra aplicación de una fórmula estética y narrativa de probada solvencia, una secuela que vuelve sobre el material de partida (el cuento de William Steig) para investigar cuánto más se puede tensar hasta que acabe por romperse del todo. A estas alturas, ya nos deberíamos saber de memoria el esquema narrativo sobre el que se apoya cada entrega: Shrek realiza una búsqueda, le acompañan sus secundarios cómicos habituales, conoce a uno nuevo, tiene un momento emotivo a la luz de una hoguera, vuelve a casa para arregar las cosas, moraleja y número musical. Así las cosas, lo único que salva a "Shrek Tercero" de llevarse un único Indy son las pequeñas variaciones que aporta a la pauta, ya sea en forma de voces invitadas (Ian McShane como Garfio, Justin Timberlake como Arturo, John Krasinski como Lancelot y, sobre todo, las chicas del "SNL" como las princesas peleonas) o de ideas estimulantes, más esbozadas que plenamente desarrolladas (la visita al instituto, ese Merlín con voz de Eric Idle y pinta de gurú new age, la pythonesca muerte del rey rana...). A este ogro no le vendría nada mal una reformulación radical de cara a próximas entregas, pero tampoco merece la pena perder el tiempo en sutilezas cuando su público potencial parece interesado exclusivamente en los bailes de Asno o las caras del Gato con Botas. Y, para una saga que siempre ha presumido de tratar igual de bien a su público adulto que al infantil, eso debería ser motivo de vergüenza.
VEREDICTO: No se atreve a potenciar el humor posmoderno y la referencia chorra sobre la moraleja infantil que pretende criticar, y eso vuelve a ser (por tercera vez) lo que convierte a Shrek en un producto que se olvida a la media hora de abandonar la sala.
TERMÓMETRO: (2/5)
5 comentarios
Cydonio -
Cydonio -
Noel -
Por cierto, cómo se ha puesto Eric Idle por la broma de los cocos... ¡Creía que era un homenaje!
http://www.thestar.com/article/216027
Cydonio -
Libertino -
que plasta de ogro brasas, joder