Blockbusters '08: "La Momia: La tumba del Emperador Dragón"
Despertar momias siempre tiene consecuencias catastróficas, pero eso es porque a nadie se le ocurre preguntar antes a la propia momia. La franquicia iniciada en 1999 por Stephen Sommers no sólo no necesitaba ser resucitada a estas alturas, sino que seguramente sus personajes (que no sus productores o sus estrellas) tampoco lo desearan: como muertos del pasado que vuelven a la (no) vida en un entorno ajeno, los miembros de la familia O’Connell tienen que hacer frente, con singular desgana, a antiguas maldiciones chinas, guerreros de terracota y los efectos especiales terribles que siempre han caracterizado a la saga. De hecho, "La tumba del Emperador Dragón", secuela tardía que nadie reclamaba, demuestra lo innecesario de que todo cambie (China por Egipto) para que, en el fondo, siga siendo lo mismo. Si "El retorno de La Momia" era un remix descreído de la primera entrega, esta es un remix del remix, un espectáculo montado con materiales prestados y gastados por el uso. No es casual encontrar por doquier frases como "Allá vamos otra vez" o "Estoy harto de las momias": es como si los propios personajes fueran conscientes de que han sido convocados para un eterno retorno, que tiene más de operación comercial que de película de verdad. Si la saga alguna vez tuvo algo parecido a sentido de la maravilla, "La tumba del Emperador Dragón" lo anestesia sin piedad.
Podría resultar incluso entrañable ver cómo los O’Connell se han convertido en meras sombras de lo que ellos consideran un pasado glorioso, pero que en realidad no fue tal: uno (que ha cambiado incluso de intérprete) rentabiliza sus recuerdos a través de novelas de misterio, otro regenta un local llamado Imhotep's, Rick recrea sus dotes para el combate con lo sobrenatural mientras pesca truchas... Al igual que en "X Files: Creer es la clave", el tono de esta aventura está lejos de la diversión veraniega y muy cerca de lo inanimado, de lo mustio. Quizá la clave esté en Jet Li, cuyo personaje no solo es incapaz de recrear el sentido trágico de la era Arnold Vosloo, sino que ni siquiera tiene una escena de lucha a su altura (en lugar de eso, se transforma en bichos CGI tan insulsos como poco amenazadores). La estrategia de revivir a "La Momia" para rentabilizar el recuerdo de Indiana Jones solo parece haber servido para que valoremos aún más las impresionantes, inolvidables virtudes de "El Reino de la Calavera de Cristal", una película que enriquecía una saga inmortal. "La tumba del Emperador Dragón", en cambio, hace volar por los aires lo que ya era un cadáver felizmente olvidado.
VEREDICTO: No se trata de una película mala, sino simplemente aburrida, sin señales de vida. Ni siquiera Brendan Fraser puede inyectar carisma a este recorrido por una feria casi en ruinas: nunca un solitario Indy de puntuación fue tan significativo
TERMÓMETRO: (1/5)
7 comentarios
Shiroko -
El resto de sorpresas ya fueron: ¡Venga! ¡Otra más! ¿Pero qué estamos viendo?
EKI -
El Rey Escorpión, aún y ser The Rock el prota, me sobró.
Esta tercera tenía el enemigo ideal para pegarle una inyección que revitalizara la saga, pero se ha desaprovechado considerablemente el potencial que tenía Jet Li y su Emperador Dragón, con su ejército de terracota, cediendo pantalla a un sucesor abocado al olvido y a unos aliados que, por espectaculares y entretenidos que sean, no encajan en la historia y hacen chirriar enormemente el guión de los creadores de Smallville (que muestran ya síntomas de agotamiento, no levantan cabeza desde SpiderMan 2, para mi gusto).
morri -
Eso sí, yo le pondría un puntito más solo por el momento de humor absurdo de la vaca en el avión XDDD Me pilló tonto o algo, pero me partí de risa con eso.
Libertino -
bom -
" No es casual encontrar por doquier frases como "Allá vamos otra vez" o "Estoy harto de las momias": es como si los propios personajes fueran conscientes de que han sido convocados para un eterno retorno"
Dr Zito -
Libertino -