¿Quién quiere tener un maniquí hiperralista de un muerto en su propia casa? Pues, según Di Stefano Productions, mucha gente:
Corpses for Sale se dedica a vender a través de la red una amplia gama de muertos falsos, cuyo grado de descomposición es algo completamente a gusto del consumidor. En la web aseguran que "los cadáveres son extremadamente realistas (...) podrías estar literalmente a un pie de distancia y no estar seguro de si es (un muerto) de verdad o no, excepto por la falta de mal olor (...) la piel está hecha de látex líquido, por lo que hasta tocándolo sigue pareciendo real". Y lo mejor de todo es que valen un dineral, lo cual nos lleva a formularnos algunas preguntas: ¿de verdad hay alguien capaz de soltar tal suma de dinero para gastarle una buena broma a sus conocidos? ¿O es que la gente utiliza los muñecos de látex para dar rienda suelta a alguna perversión innombrable? ¿Quizás como objeto decorativo? ¿Y por qué todos los muñecos masculinos se parecen a Jack Palance?
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