No más nazarenos zombis
El creador del videojuego español más famoso de la historia (mucho más que esos "Comandos" imposibles de controlar) ha sido acusado de ofender los sentimientos de los miembros de una confesión religiosa, vulnerar los derechos exclusivos del titular de la marca registrada y reproducir sin permiso una obra artística (o sea, artículos 525, 274 y 270 del Código Penal). Estoy hablando de "Matanza Cofrade", un popular juego de PC que desarrolló un chico de Sevilla allá por el año 2002, y que se iba a distribuir junto con un disco del grupo Narco, como si de Iron Maiden se tratase. La dinámica del juego era muy sencilla: los cofrades de una procesión de Semana Santa se han vuelto zombis de repente (¿o ya venían así de casa?), y nosotros tenemos, pistola en mano, que volarles la cabeza. O sea, un shoot'em up resultón con temática religiosa de por medio, un "Nadie conoce a nadie" meets George A. Romero con serias posibilidades de resultar adictivo.
La dura realidad es que el juego nunca llegó a distribuirse. La realidad todavía más dura es que su creador será juzgado el 29 de septiembre, con las hermandades del Gran Poder, la Macarena y San Bernardo ejerciendo de pelotón... perdón, de acusación particular. El informático, cuyas siglas son J.C.C.S., se enfrenta a un delito contra la propiedad intelectual que podría suponerle un año de cárcel, más otros dos contra los sentimientos religiosos (que serían diez meses de multa). No obstante, la cosa no está tan malita como parece: el año pasado se absolvió de un caso parecido a otro colega que difundió por internet una foto de la virgen de Triana ejerciendo de Jenna Jameson, así que aún hay esperanza de jugar un día de estos a "Matanza Cofrade".
La dura realidad es que el juego nunca llegó a distribuirse. La realidad todavía más dura es que su creador será juzgado el 29 de septiembre, con las hermandades del Gran Poder, la Macarena y San Bernardo ejerciendo de pelotón... perdón, de acusación particular. El informático, cuyas siglas son J.C.C.S., se enfrenta a un delito contra la propiedad intelectual que podría suponerle un año de cárcel, más otros dos contra los sentimientos religiosos (que serían diez meses de multa). No obstante, la cosa no está tan malita como parece: el año pasado se absolvió de un caso parecido a otro colega que difundió por internet una foto de la virgen de Triana ejerciendo de Jenna Jameson, así que aún hay esperanza de jugar un día de estos a "Matanza Cofrade".
3 comentarios
Noel -
Lo más curioso de todo es que condenan este videojuego son los mismos que pedían libertad para DJ_Systo, el de la canción de los rumanos. ¿Justicia para todos?
J. -
jvol -