Bienvenidos a la casa de muñecas
Aquí va un link que haría las delicias de Todd Hayes: Murder in the Doll House es un artículo del "Boston Globe" sobre una de las personas más raras del mundo de la medicina forense, y eso que en ese mundo tiene que haber gente muy rara: Frances Glessner Lee, una cariñosa abuelita de Chicago que bien podría ser el antecedente directo de Jessica Fletcher, pues comparte con ella su pasión obsesiva (pero, eso sí, disfrazada de mero pasatiempo macabro) por el crímen, más concretamente por el estudio meticuloso y compulsivo de asesinatos reales. Y ahora viene lo bueno: la entrañable F.G. Lee era aficionada a reproducir escenas del crímen a escala valiéndose de su colección de casitas de muñecas, lo cual la convertiría en una vieja con un sentido del humor un tanto esquinado... si no fuera porque la señora era licenciada en Medicina por la Universidad de Harvard. O sea, que lo que bien podría ser una excentricidad lúdica es en realidad ciencia forense en miniatura (aunque lo que no sé es si sus reproducciones ayudaban mucho a los investigadores de la policía...).
El libro The Nutshell Studies of Unexplained Death (foto) es un personalísimo recorrido por la obra de la abuela Frances de la mano de la fotógrafa Corinne May Botz, que descubrió su trabajo mientras preparaba un documental sobre coleccionisrtas de casas de muñecas. Las (pocas) instantáneas que he podido ver en la página de Amazon y en mi ardua búsqueda por Google revelan un nivel de detalle realmente enfermizo: hasta la más mínima gota de sangre aparece en estos macabros dioramas que convierten a víctimas de asesinatos reales en meros juguetes destinados a representar el papel de sus vidas (o de sus muertes) en un escenario en principio pensado para jugar a las casitas o a tomar el té. ¿Por qué no cancelan de una vez la aburridísima "C.S.I." y hacen una serie de televisión basada en el arte forense de esta peculiar señora?
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Steam Man -