Top 10 Gorilas
Con motivo de la magnífica Semana del Disfraz de Gorila (que me imagino que estaréis siguiendo todos a través de Bizácoras, ¿verdad?), "El Emperador de los Helados" rinde homenaje a diez de los gorilas más carismáticos de la Historia, diez animales a los que ya casi nos atreveríamos a calificar como humanos (de hecho, algunos de ellos son, de alguna manera, humanos), diez primates para la eternidad. Que lo disfrutéis:
10. Ape ("George de la jungla"): Surgida de la fecunda imaginación de Jay Ward, esta parodia-homenaje al Tarzán de Edgard Rice Burroughs hizo las delicias de toda una generación de pequeños teleadictos en la década de los 60, aunque (eso sí) no llegase a los niveles de excelencia de "El show de Rocky y Bullwinkle", la verdadera joya de la corona wardiana. El programa tuvo, desde el primer momento, una estrella indiscutible: Ape, el elegante e inteligentísimo gorila que acompañaba al bueno de George y a su chica Ursula cada sábado por la mañana. Siguiendo una tradición animada según la cual la mascota siempre debe ser más lista que el amo (y, por supuesto, tener la capacidad de hablar), Ape venía a ser como la quintaesencia del gentleman inglés atrapada en el cuerpo de un gorila: no en vano, le prestaba su voz el legendario Paul Frees, capaz de imitar como nadie al añejo actor británico Ronald Colman. En un acierto de casting, el Ape de la película de 1997 (un animatronic bastante resultón) tenía la voz de John Cleese, que no abandonó al delicioso personaje ni siquiera en la secuela solo-para-videoclubs del año 2003.
9. El gorila de Brooklyn ("Bela Lugosi Meets a Brooklyn Gorilla"): Poco antes de conocer a Edward D. Wood Jr., el ya muy decadente Bela Lugosi protagonizó esta comedia psicotrónica y completamente demencial, concebida a mayor gloria del dúo de cómicos de serie Z Duke Mitchell y Sammy Petrillo. Lo que en un principio debería haber sido una aventura selvática modelo Dean Martin y Jerry Lewis (de los que Mitchell y Petrillo bebían sin pudor y, también, sin suerte) acabó convirtiéndose en una de las películas más increíblemente extrañas de la década de los 50, un cóctel explosivo de desatinos varios que uno sólo puede ver con la boca completamente abierta. La interpretación circunspecta de un Lugosi que no parecía ser consciente de la naturaleza del producto puede hacer que nos olvidemos de lo que de verdad importa: la transformación de Duke Mitchell en gorila por obra de un científico loco (el bueno de Bela) celoso de la relación del ¿cómico? con Nona, la hija del jefe de la tribu nativa de la isla de Coca-Cola (sic). Un filme único por muchas razones.
8. King Solomon ("Tom Strong"): ¿Qué es un héroe selvático sin su compañero primate? Eso mismo debió de pensar Alan Moore a la hora de concebir a King Solomon, el inseparable compañero del justiciero pulp Tom Strong, un gorila refinado y hablador que recuerda al Ape de "George de la jungla" pero que, a medida que lo vamos conociendo mejor, descubrimos que posee una personalidad propia e inimitable. Ataviado con jersey, pajarita y mocasines, Solomon es un ferviente lector, un sabio consejero e incluso un valioso aliado a la hora de luchar contra el mal. Se adapta por igual a las condiciones de vida de la salvaje Attabar Teru y de la retrotecnológica Millenium City, y sus peleas con el robot victoriano Pneuman les convierten a ambos en una pareja cómica muy valiosa. ¿Quién no quiere tener un mayordomo así?
7. Donkey Kong (la serie de videojuegos que lleva su nombre, especialmente "Donkey Kong Country"): La primera misión de este gorila marrón no fue nada fácil: su creador, el mítico Shigeru Miyamoto, tuvo que rediseñar un juego ("Radar Scope", 1980) que no había por dónde cogerlo por órdenes de los jefazos de Nintendo. Así fue cómo nació "Donkey Kong" (1981), el histórico videojuego de arcade en el que el jugador debía esquivar las numerosas trampas del gorila para rescatar a su amada princesa. Tras hacer frente a una demanda de plagio de la Universal (Donkey se parecía demasiado a cierto gorila cinematográfico), el personaje fue tan popular que dio origen a varias secuelas que repetían el mismo esquema con ligeras variantes, hasta que llegaron los 16 bits y, con ellos, "Donkey Kong Country" (1994): por primera vez, el gorila con corbata se liberaba de las repetitivas pantallas que caracterizaron su primera etapa, iniciando así un peregrinaje por distintas plataformas que culminaría en la Nintendo 64 y, más recientemente, también en la GameCube. Hoy en día, Donkey es ya una estrella que realiza cameos en otros juegos de la compañía y posee varios clubs de fans internáuticos: lo que se dice una leyenda.
6. Gorilla Grodd (DC comics): El gorilote malvado que aparece, cráneo agujereado en mano, en la foto principal de este post es un viejo amigo de los aficionados a los tebeos de "Flash": Grodd no era más que un primate normal y corriente hasta que una nave espacial se estrelló en su África natal, dotándole a él y a todos sus conocidos de un poder mental inimaginable. El problema es que Grodd también parecía ser un megalómano en potencia, ya que usó su capacidad telequinética y su influencia en las mentes ajenas para tratar de conquistar el mundo, forzando al veloz Barry Allen a darle su merecido en más de una ocasión. Miembro de la Sociedad Secreta de Supervillanos y enemigo mortal de los Teen Titans, este personaje creado por John Broome y Carmine Infantino también ha tenido esporádicas apariciones en la pequeña pantalla, especialmente en la sensacional serie animada "Justice League Unlimited".
5. The Gorilla (Mascota de los Phoenix Suns): El mundo de las mascotas deportivas está lleno de criaturas fascinantes, pero ninguna de ellas es tan carismática como la del equipo de baloncesto de Phoenix. The Gorilla (también conocido como The Suns Gorilla) es algo así como el Bender de las mascotas deportivas: un animalote nada refinado al que le gusta armarlas gordas, ser alabado por el público e ingerir grandes cantidades de alcohol. Su especialidad son los mates espectaculares, para los que se ayuda de un trampolín y, de vez en cuando, añade un aro de fuego para complicar las cosas. El hombre que hay dentro del disfraz de gorila se llama Bob Woolf, lleva haciendo esto desde finales de los 80 y afirma que le encanta. Así que brindemos por él.
4. Night Monkey ("Jackass"): Si existe un programa televisivo capaz de comprender en toda su magnitud una festividad tan poco ortodoxa como el Día del Disfraz de Gorila, ese es sin duda "Jackass". Lo cierto es que estos tipos no necesitan la excusa del 31 de enero para vestirse de gorila y salir por la calle a comportarse como tal: "Night Monkey" era una gloriosa sección del todavía más glorioso show en la que el equipo comandado por Johnny Knoxville iba sembrando el caos por las calles de la ciudad al estilo primate. El objetivo principal parecía ser dar un susto de muerte a todo peatón que se cruzaran, pero tampoco faltaban los asaltos a gasolineras, las cabriolas suicidas en los postes de la luz o los ataques frontales a todo tipo de vehículos. Además, si pincháis en el enlace de arriba podréis ver cómo una estrella de cine a la que me encantaría odiar pero no puedo se sumó a la fiesta gorilera como estrella invitada. Ah, y "Night Gorilla" se transformó en "Night Panda" para la película, pero los muchachos se dieron cuenta demasiado tarde de que los osos panda viven en China y no en Japón, que fue donde se rodó esa secuencia.
3. Weeping Gorilla ("Promethea"): Otra vez Alan Moore y otra vez America’s Best Comics, cuya mezcla de compleja posmodernidad y reivindicación del candor de la pulp fiction ha hecho mucho por el regreso de los gorilas a los cómics. En este caso, "Weeping Gorilla" es el tebeo dentro del tebeo "Promethea", un personaje tira cómica con el que Moore parodia la autoindulgencia de muchos autores de hoy en día. Básicamente, la cosa consiste en un gorila que no para de llorar y de lamentarse de la vacuidad de la vida moderna, en un estilo patéticamente profundo que tiene su contrapunto en "Chucklin’ Duck", otro personaje falso pero dotado de un optimismo vital que le convierte en el antagonista del gorila llorón. Cuando Sophie Bangs visita la Inmateria, Moore nos muestra una versión real de Weeping Gorilla (tan deprimido como siempre), al que también podemos cazar en breves cameos dentro de historietas de "Tom Strong" y "Greyshirt". Ahora que lo pienso: ¿no será una versión primate de las tiras de Maitena?
2. Kong ("King Kong", sus remakes, secuelas y derivados): Su nombre lo dice todo. Este gorila, aparte de notablemente más alto que la media de su especie, tiene todo lo que hay que tener para ser considerado un rey por los indígenas de Skull Island, que le ofrecen periódicamente jóvenes muchachas como sacrificio. El problema es que a Kong parecen gustarle las rubias, tanto que es incapaz de matarlas como a todas las demás mujeres: Fray Ray, Jessica Lange o Naomi Watts han supuesto su perdición a lo largo de las décadas, casi siempre ejemplificada en su caída desde el Empire State (también ha caído desde las Torres Gemelas, pero va a ser mejor pasar eso por alto). Ya sea en animación stop motion o en versión WETA-Andy Serkis, Kong sigue siendo el rey en todos nuestros corazones. Aunque aún seguimos sin saber por qué demonios nunca destrozó la muralla de su isla natal...
1. Copito de Nieve (Zoo de Barcelona, 1964-2003): Floquet de Neu era un gorila albino. Un gorila albino. ¿Necesita más razones para entrar de cabeza en el número uno de la lista? Único en su especie, el primate anteriormente conocido como Nfumu Ngi (en Guinea Ecuatorial no conocían la nieve, ni tampoco los nombres cursis) fue capturado en 1966 por el doctor Jordi Sabater Pi y trasladado al Parc Zoològic de Barcelona, donde recibió tratamiento de superestrella desde el primer momento. Su condición de gorila albino le debía resultar muy útil a la hora de ligar, porque Copito de Nieve fue padre de 22 hijos con tres gorilas hembra distintas, aunque ninguno de ellos heredó el pelaje blanco de su padre. Su mejor época fueron los últimos años de su vida, en los que ejercía como animal más sabio del lugar, tanto que uno casi se lo podía imaginar tratando a los demás animales del zoo como los súbditos suyos que eran. Por desgracia, un cáncer de piel acabó con su vida a la avanzada edad de 40 años (bueno, en realidad se optó por la eutanasia), convirtiéndole así en el emblema del Zoo de Barcelona y en un mito para futuras generaciones. De todos es sabido que Peter Jackson tuvo muy en cuenta al gorila albino a la hora de reformular a King Kong, como también los miembros del grupo teatral Animalario a la hora de hacer una de sus payasadas. Te echamos de menos, Copito.
* Este post ha sido escrito por cientos monos tecleando máquinas de escribir, así que si consideras que tiene fallos, faltas de ortografía o ausencias imperdonables como la de Magilla Gorilla, no dudes en dejar un comentario aquí debajo.
10 comentarios
estefania -
rami -
Giuseppe Tangana -
Noel -
Ahí queda eso.
Queco -
Lord Christmas -
Un saludo!
PD: Muy chulo el blog!!
Noel -
La-Ruina -
Dr.Benway -
Gran post.
kalimero -
Muy bueno el post.
Saludos.